DeFi explicado: cómo funcionan los préstamos descentralizados

Cuando se habla de criptomonedas, muchos piensan automáticamente en “comprar tokens y esperar que suban”. Pero el universo blockchain va mucho más allá de la especulación. El ecosistema DeFi —finanzas descentralizadas— propone una alternativa completa al sistema financiero tradicional: préstamos, ahorros, intercambios y más, todo sin bancos, sin intermediarios, sin fricciones. En este artículo te explicamos de forma clara y directa cómo funcionan los préstamos descentralizados, una de las piezas clave del nuevo sistema financiero en cadena.


¿Qué es DeFi y por qué importa?

DeFi es el acrónimo de “Decentralized Finance” (finanzas descentralizadas). Hace referencia a una serie de aplicaciones y protocolos construidos sobre blockchains como Ethereum, que reproducen servicios financieros sin necesidad de intermediarios tradicionales (bancos, brokers, financieras).

Gracias a contratos inteligentes, los usuarios pueden prestar, pedir prestado, intercambiar o generar intereses de forma automática y segura, en una red pública y transparente.

La promesa de DeFi es clara: devolver el control del dinero a los usuarios, permitiendo operar sin censura, sin fronteras y con menores comisiones.

Préstamos descentralizados: ¿cómo funcionan?

En DeFi, cualquiera puede ser prestamista o prestatario. No hay papeleo, ni estudios de riesgo, ni aprobación manual. El proceso se basa en colateralización automática y en reglas predefinidas por contratos inteligentes. Así es como funciona en la práctica:

  1. Depósito como colateral
  2. Para pedir prestado, primero debes bloquear una cantidad de criptoactivos como garantía (por ejemplo, ETH o BTC envueltos). Este depósito respalda el préstamo.
  3. Obtención del préstamo en otra moneda
  4. Una vez bloqueado el colateral, puedes recibir otra criptomoneda como préstamo (por ejemplo, USDT o DAI). El sistema garantiza que el valor del colateral sea superior al del préstamo (por seguridad).
  5. Intereses y liquidación
  6. Los intereses se calculan automáticamente. Si el valor del colateral baja por debajo del umbral crítico, el contrato puede liquidar tu garantía automáticamente para evitar pérdidas al sistema.
  7. Devolución y desbloqueo
  8. Cuando devuelves el préstamo más los intereses, el contrato inteligente libera tu garantía y la recuperas en su totalidad.

¿Y si quiero prestar en lugar de pedir prestado?

Ser prestamista en DeFi es tan simple como depositar fondos en un protocolo de lending. A cambio, obtienes rendimientos generados por los intereses de los prestatarios. Algunos protocolos incluso te dan un token representativo (como aDAI o cUSDC) que acumula valor con el tiempo.

Plataformas como Aave, Compound o MakerDAO te permiten prestar y ganar intereses sin tener que interactuar con ningún usuario directamente.

Ventajas frente al sistema tradicional

  • Accesibilidad global: sin importar tu país, historial financiero o situación legal.
  • Intereses más competitivos: tanto para prestar como para pedir.
  • Sin intermediarios: menos comisiones, más rapidez.
  • Transparencia total: puedes auditar el contrato y el historial de préstamos en la blockchain.

Riesgos y precauciones

Aunque el sistema suena perfecto, hay que tener en cuenta algunos riesgos importantes:

  • Volatilidad del colateral: si el precio del activo baja, podrías ser liquidado automáticamente.
  • Errores en contratos inteligentes: aunque auditados, siempre existe riesgo de bugs o hackeos.
  • Cambios en el protocolo: algunos proyectos pueden cambiar reglas mediante gobernanza y afectar tu posición.
  • Dependencia de stablecoins: muchos préstamos se otorgan en monedas estables cuya estabilidad depende de terceros.

Por eso, antes de participar, es clave entender bien el protocolo, diversificar y nunca invertir más de lo que puedes permitirte perder.

Ejemplo real: pedir un préstamo en DeFi paso a paso

  1. Te conectas a Aave con tu wallet (por ejemplo, Metamask).
  2. Depositas 1 ETH como colateral.
  3. El sistema te permite pedir prestado hasta un 80% del valor en DAI.
  4. Recibes DAI en tu wallet y puedes usarlo como quieras.
  5. Si el precio del ETH baja demasiado, podrías ser liquidado.
  6. Devuelves el DAI + intereses, y recuperas tu ETH bloqueado.

Todo el proceso se realiza sin registrar tu identidad, sin pedir permiso, sin bancos.


Conclusión

Los préstamos descentralizados son una de las piezas más fascinantes de la revolución DeFi. No se trata solo de especular con criptomonedas, sino de construir una infraestructura financiera abierta y programable. Si quieres ir más allá del “comprar y holdear”, entender estos mecanismos te permitirá sacar verdadero provecho de tus criptoactivos.

Eso sí, como todo en el mundo cripto: estudia primero, experimenta con responsabilidad… y nunca firmes un contrato inteligente que no entiendas.